M i historia con los Babasónicos tiene raíces profundas, lejanas. Recorrer esos caminos es inventar mucho, porque esos años de adolescencia tardía y tóxica, se encargaron de borrar las certezas, y me dejaron las sensaciones, que hasta hoy quedan. En esa época, la conversación bailaba entre la polémica por el término de Rock Alternativo ("alternativo a qué" te preguntaba algún amigo con ganas de discutir), del porqué no despegaba el Rock nacional (sí, desde esa época), de la gran farsa del underground, y otras cosas más o menos trascendentales, pero cuando salía la referencia de los Babasónicos, había un consenso. Ellos eran (y son) diferentes. Y así, gracias a la sabia decisión de ponernos MTV por señal abierta, disfrutamos de la omnipresencia babasónica desde sus inicios en los arrabales del Raizónica, hasta la toma de poder en el primetime de la gloriosa cadena. Fuimos testigos de sus comienzos más kitsch , los sueños camp y la evolución al porn...